+de 200 km/h D Decía el escritor Álvaro Cunqueiro que toda Galicia está llena de pequeñas Compostelas. Rincones de piedra levemente mojada por el orva-llo sempiterno, con aire de pueblo y un sueño de refinamiento atlántico, quizá barroco, quizá romá-nico. En apenas dos generaciones, aquella Galicia cunqueiriana ha cambiado bastante. Se han asfalta-do pueblos y aldeas y se han transformado sus ciu-dades y villas de sabor rural con diferentes inter-pretaciones de la modernidad. La praza da Peregrina constituye el centro neurálgico de la tranquila ciudad gallega.