VENECIA el gran público. “No solo por las colecciones en sí, sino porque muchas de ellas se encuentran en lugares donde no llega el turismo masivo. Es la mejor forma de ver la ciudad de otra for-ma”, afirma. El barón Giorgio Franchetti salvó del abandono Ca’ d’Oro, uno de los palacios más célebres del Gran Canal, e instaló allí su colección, que incluye obras de Mantegna, Tiziano y van Dyck. Los Franchetti no eran venecianos, y su acceso a la nobleza era reciente, pero contaban con una gran fortuna. En el siglo XIX la aristocracia de la República había caído en decadencia, y el capital pasó a ser más relevante que el apellido. El palacio familiar de los Franchetti, frente a la Academia, ha sido restaurado recientemente. El interior neogótico se extien-de en un bello jardín entre el Gran Canal y el Campo di Santo Stefano. El espacio participa en la Bienal de arte contemporáneo con dos exposiciones. © Edush Vitaly/Getty Images Exterior del gótico palacio Fortuny. // The exterior of the Gothic Palazzo Fortuny. El palacio Fortuny, con sus paredes enteladas y restaurado en 2022. // The Palazzo Fortuny, with walls painted and restored in 2022.