renacentista mallorquín, tal como nos cuenta Juan Pantaleoni, nieto de Cardona y actual director del establecimiento. O el mismísimo Aristóteles Onassis que, ya a finales de los años 50 y principios de los 60, habría coincidido con don Juan de Borbón en el restaurante del Portmany, donde no era entonces extraño que, si un comensal deseaba saborear una langosta fresca, un empleado cogiera una barca y remara hasta el vivero que allí creó el establecimiento. Después llegarían hippies de postín, intelectuales y artistas (como Ignacio y Josefina Aldecoa o Rafael Azcona) que acudían a la bahía para desconectar del mundanal ruido. Larga vida al Portmany. When Walter Benjamin walked through the doors of the Hotel Portmany in Sant Antoni (Ibiza) that night in July 1933, for a few hours he forgot his depression, his financial problems and the sadness of the divorce that had taken him to the island months earlier. To music played by Orquestina Ibiza Jazz, he ENG © Cortesía de Juan Pantaleoni Roselló. Ibiza a principios del siglo XX, ya poblada de casas blancas. // Ibiza at the beginning of the 20th century, already populated with white houses.