ENTREVISTA ¿Sin renovables no hay desarrollo sostenible? Está aumentando la necesidad de energía en el mundo, lo cual es una buena noticia porque ese incremento se debe, entre otras causas, a la mejora de la calidad de vida en parte de la población. En la medida en que cada vez más personas accedan a esa calidad razonable, seguirá creciendo la demanda. Por otro lado, el con-senso científico junto con pro-tocolos y acuerdos como Kioto y París nos dicen que, para minimi-zar el impacto del calentamiento global, esa generación extra solo puede venir de fuentes renova-bles. Por lo tanto la construcción de nuevas infraestructuras soste-nibles es primordial. ¿El plan de construcción responde a esa demanda? Esta compañía lleva muchos años defendiendo la necesidad econó-mica y ética de las renovables. Esa batalla está ganada. El mundo, salvo contadas excepciones, asu-me el mensaje. Pero defender una causa justa no justifica cualquier cosa. Por eso trabajamos para la excelencia, elegimos con extremo más personal Las aficiones sin las que no se entiende a sí mismo… Compartir la vida con mi seño-ra, sin ella no me entiendo a mí mismo. Mesa y mantel con mi mujer y una buena cuadrilla de amigos para arreglar el mundo, después de una buena sudadi-ca jugando al tenis. Eso es para mí un domingo perfecto. El valor que más necesita este mundo… Cada vez echo más en falta gente que nos una en vez de dividirnos y separarnos. No sé si lo consigo pero lo intento y se lo pido a mi equipo: tender puentes con los compañeros, con los clientes, con el entorno, hay que tender puentes con todo el mundo. Un libro, una canción, una pelí-cula… El Quijote o La casa verde. Plany al mar y Pare, de Serrat, son dos cantos a la tierra, al planeta. O cualquiera de las clásicas de Silvio Rodríguez: Ojalá, Te doy una canción... Película: Amanece que no es poco, la veo una vez al año y la seguiré viendo. Un personaje histórico que admira… Nelson Mandela. Precisamente porque une. Me supo fatal ver a tantos políticos en su fune-ral para hacerse la foto pero no para seguir su ejemplo. Tuvo motivos para odiar, pero fue valiente, tendió la mano. La otra profesión que le hu-biera gustado ejercer… Esa la dejo para mi próxima reencarnación porque estoy muy bien servido con la que tengo.