PALAS SOBRE RUEDAS, UNA DE AVENTURAS La operación logística para trasladar los aerogeneradores de Puerto de Paracas a su emplazamiento final ha sido una de las más complejas en la historia de ACCIONA Energía. Sin la colaboración de las autoridades locales y de la Policía Nacional, no hubiera sido viable. PALAS SOBRE RUEDAS, UNA DE AVENTURAS ¿Puede el transporte de 23 aerogeneradores ser más compli-cado que su propia instalación? Puede, si tiene que recorrer 240 kilómetros de desierto costero y superar parajes endiablados entre Puerto de Paracas y el emplazamiento final en Marcona. Que un equipo de 150 personas sea necesario para planificar y ejecutar la tarea da idea del desafío logístico. Todo se confa-bulaba en contra. El propio tamaño de los aerogeneradores, con 148 metros de altura, ha exigido separarlos en 12 componentes y realizar 276 viajes en una ruta que en coche requiere cinco horas, pero en los camiones usados, tres días. Como si de una opera-ción militar se tratase, se han construido puentes provisionales y desmontado y montado obstáculos como semáforos, telepeajes o carteles de carretera, junto con cortes provisionales de tráfico. Claro que no todos los componentes son iguales. Los que más planificación piden son las palas con sus 80,5 metros y 26,6 toneladas. Cada una ha realizado dos trasbordos al enfren-tarse a las seis curvas cerradas de la vía Panamericana en el paso montañoso de La cara del Inca. Con un transporte con-vencional y la pala acostada, imposible, no da el radio de giro, así que hubo que cargarlas en camiones extensibles, pasar-las a otro camión especial con Blade Lifter, superar las curvas y devolverlas al camión extensible para completar el trayec-to. ¿Que qué es el Blade Lifter? Ingeniería de transporte ayu-dando a la ingeniería de energía: un potente sistema hidráulico que permite elevar la pala hasta 60º para acortar el remolque y superar el vértice de la curva. Aún así, han empleado tres horas en recorrer los apenas seis kilómetros del paso. Menos mal que otro tramo ensanchaba el alma: el área de las Líneas de Nazca, Patrimonio de la Humanidad. La última teoría arqueológica sugiere que servían para implorar lluvia al cielo mediante rituales de fertilidad. Desde siempre a vueltas con el clima.