La innovación debe estar al servicio de la creación de entornos acogedores y compasivos para las personas y sus familias, donde la espiritualidad debe tener cabida, ya que nos proporciona un sentido de propósito tribuna José Carlos del Castillo Rodríguez Director Gerente de los Centros de San Juan de Dios Tenerife La gestión de un centro de San Juan de Dios se guía por los valores de la institución e implica, en ese ejercicio por ser útiles a la sociedad, una proyección de futuro que garantice una actualización constante de las necesidades reales que atendemos y los métodos con que lo hacemos. SEGUIR LEYENDO SEGUIR LEYENDO Hospitalidad e innovación: atender el presente con proyección de futuro CERRAR CERRAR La Hospitalidad, nuestro valor central, así como la calidad, espiritualidad, respeto y responsabilidad, conforman ese corazón que sustenta toda nuestra actividad asistencial y nos obliga a ser innovadores y combinar experiencia y modernidad para mantenernos fieles a nuestra misión, donde la persona atendida es el centro. En un mundo en constante evolución, debemos adaptarnos a los nuevos desafíos y oportunidades. La tecnología y los cambios demográficos transforman la atención sanitaria. Por ello, es imperativo que nos preparemos para atender a los problemas de salud que, siendo más prevalentes, tienen peor respuesta en nuestro entorno, pero también que incorporemos los últimos avances tecnológicos. Todo ello para mejorar la calidad de la atención que brindamos a las personas que acuden a nuestros centros. El futuro se construye hoy y es fundamental contar con profesionales altamente cualificados y comprometidos, que además tengan la predisposición para adaptarse a estos cambios. La gestión de los profesionales es uno de los grandes retos del futuro próximo. Debemos repensar sus funciones, especialmente en el ámbito de la medicina y enfermería, que será crucial para gestionar la disponibilidad de profesionales y la incorporación de las nuevas generaciones. Por otro lado, la automatización y el uso de la inteligencia artificial también serán fundamentales, no para eliminar el trato humano, sino para hacer más eficientes las tareas administrativas, pero también las asistenciales. Todo ello con el objetivo de mejorar la atención y liberar tiempo para que los profesionales puedan centrarse en el trato humano y directo con las personas atendidas. El objetivo es que la tecnología sirva para potenciar la Hospitalidad, no para deshumanizarla. La innovación, por tanto, debe estar al servicio de la creación de entornos acogedores y compasivos para las personas y sus familias, donde la espiritualidad debe tener cabida, ya que nos proporciona un sentido de propósito y nos conecta con una dimensión de la persona especialmente relevante en momentos de enfermedad. Nuestros centros, además, cada vez deberán ser más eficientes y sostenibles, optimizando el uso de los recursos y reduciendo nuestro impacto ambiental. Simultáneamente, debemos invertir en la formación y desarrollo de nuestros profesionales, garantizando así su preparación para adaptarse y, con las habilidades necesarias, para brindar una atención de excelencia en un entorno cada vez más cambiante. En este contexto de evolución y cambio, la ética será fundamental para guiar el uso de estas nuevas herramientas y tecnologías. La bioética nos recuerda que, a pesar de los avances, nunca debemos perder de vista la dignidad de la persona y la responsabilidad que tenemos con ella. La Hospitalidad, guía de los centros de San Juan de Dios, necesita una adaptación constante a los cambios de la sociedad a la que servimos. CERRAR