GIRONA FIGUERES +de 200 KM/H GIRONA Historia y baños, de Begur a Roses FIGUERES Abrazar a Dalí y la cocina que ama Ferran Adrià Seguir leyendo Girona por Carlos Sánchez Pereyra/Getty. Figueres por David Kilpatrick / Alamy / Cordon Seguir leyendo QUÉ HACER AQUÍ… Pídete un cóctel de colores en Nykteri’s Cocktail Bar, en Girona. Su carta de cócteles y la fotogenia de sus combinados lo convierten en un must no solo entre la población local. Si lo tuyo es lo culinario, pásate por Casa Cacao, el paraíso dulce de los hermanos Roca. QUÉ HACER AQUÍ… Acude al Festival Castell Peralada. El conjunto medieval del Castillo de Peralada es el escenario de este festival durante los meses de julio y agosto. En sus jardines se suceden los conciertos en las noches de verano. La iglesia y el claustro, en cambio, acogen recitales, conciertos de cámara y óperas de pequeño formato. Artistas como Silvia Pérez Cruz y Rufus Wainwright han confirmado para este año. Arriba los bigotes, llegamos a territorio dadaista. Pocos artistas están más ligados a su tierra de lo que Dalí lo está a Figueres (vale, y también a Cadaqués). Quizá porque aquí está el Teatro Museo-Dalí (en la foto), espacio que no solo sirve como contenedor de algunas de sus piezas más icónicas, sino de su propia tumba. Este lugar es lo opuesto a un museo y gustará tanto a adultos como a niños por su dramática puesta en escena. Para reponer fuerzas, nada mejor que parar en el Motel Empordà de Figueres. Su restaurante, venerado por chefs como Ferran Adrià y Joan Roca, es una parada obligada para los amantes de la mejor cocina catalana y francesa. Lleva más de 60 años abierto y está tan de moda como el día de su inauguración. Por algo será. Girona impresiona. Su arquitectura medieval, su Barrio Viejo amurallado o las ruinas romanas de la fortaleza Força Vella pueden dejar sin aliento al viajero más experimentado. Sin embargo, es en verano cuando mejor despliega sus encantos. Las playas de Roses o de Cadaqués ofrecen imágenes de postal (o de anuncio de cerveza). Hay también eventos y ferias que merecen la pena por toda la costa. De entre todos destacamos la Feria de los Indianos en Begur. La fiesta, este año del 3 al 5 de septiembre, celebra la unión entre este pueblo (derecha) y Cuba, a donde partieron y de donde volvieron muchos de sus habitantes a lo largo del siglo XIX. Conciertos de grupos cubanos, mercado y actuaciones convierten el paseo marítimo en una suerte de malecón de una Habana ya extinta, que se puede apreciar también en las construcciones de la época. Enfúndate tu sombrero panameño, tu camisa de lino y descubre que Caribe y Mediterráneo combinan sin problema.