18.30 horas Tarancón, noble y artística Ser el segundo municipio más poblado de Cuenca condiciona sus costumbres y su patrimonio. Tarancón tiene mucho de “noble ciudad” en sus rincones. No fue en vano que, en 1833, la reina María Cristina de Borbón se casara con un taranconero, Agustín Fernando Muñoz, hizo que en la localidad se levantaran palacios y magnos edificios que aún conserva. “Hay palacios como el de los duques de Riansares, el actual ayuntamiento, pero también se puede visitar el arco de la Malena, del siglo XII, o el retablo mayor de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, recién restaurado”, cuenta Raúl Añover, concejal de cultura y turismo. Pero Tarancón también es arte del siglo XX, y acoge la Colección de Pintura Emiliano Lozano, que recoge toda la obra de cartelería y pictórica de este artista nacido en la localidad. Colección de Pintura Emiliano Lozano. Casa Parada. tarancon.es 16.30 horas Una pequeña Roma en Cuenca En el cerro de Cabeza de Griego, en la localidad de Saelices, está otra de las paradas de esta ruta, el parque arqueológico de Segóbriga. Un importante yacimiento celtíbero y romano, que fue un punto de referencia para el Imperio en la meseta. Llegó a albergar un teatro y un anfiteatro, y hoy son visitables el acueducto, las necrópolis, las termas, el circo y la basílica visigoda, entre otros restos que ejemplifican el explendor que vivió esta tierra en tiempos del emperador Augusto, alrededor del año 12 a.C. “El visitante de Segobriga descubre una pequeña Roma. Sus edificios públicos son imponentes. Es un enclave arqueológico que presenta al visitante los restos in situ, no requiere ningún esfuerzo de imaginación para leer los distintos espacios que formaron parte de la ciudad romana”, cuenta Rosario Cebrián Fernández, directora científica del yacimiento. Parque Arqueológico de Segóbriga. Ctra. Carrascosa de Campo a Villamayor de Santiago, s/n. Saelices. segobriga.org