tuó texturizado con las improntas de cañizo grapado al propio encofrado. Antes de los trabajos de excavación, se llevó a cabo el apuntalamiento del muro en esa zona, al tiempo que se retiró tierra del intradós del muro para aligerar el em-puje sobre este. Los contrafuertes se levantaron sobre unas zapatas de 70 cm de canto, que se anclaron al terreno con mi-cropilotes para evitar un posible deslizamiento. Un geo-textil separaba el hormigón de cemento del terreno. Este elemento se ejecutó con los materiales convencionales: hormigón de central tipo HA-30/B/20/IIa+Qb y acero corrugado B 500 S. Montada la primera altura de las armaduras de acero inoxidable corrugado ACX915, se levantaron los encofra-dos. Por la altura del contrafuerte, las parrillas de acero se elevaban según se iba hormigonando y montando el encofrado. Este fue un trabajo complicado, pues el empuje del hormigón requirió extremar la precaución para no sufrir percances que estropearan el acabado del elemento. Una vez levantados los contrafuertes, se muralla aspillerada Secuencia de imágenes para ilustrar la ejecución del intradós de la muralla aspillerada.