EDITORIAL Macarena García Oliver // Directora Movicarga En el último mes, aquél que llamaban Willy Fog se ha quedado como un aficionado a mi lado, es lo que hay, en la vida, si no espabilas, te superan. A lo que voy, estuve en la feria de Conexpo en Las Vegas, Estados Unidos, una de las ferias que más me gusta, por cierto, y aproveché para dar una vuelta antes a un par de cañones cerca de Las Vegas. El del Antílope, de los Navajos, es un auténtico espectáculo. Me surgió la curiosidad por leer cosas de los indios de Estados Unidos y llegué a una teoría con la que no me había cruzado pero que viene muy al pelo para un par de empresarios que conozco, que se empeñan en que la organización funcione, o algunas personas funcionen, cuando ya están muertos. También nuestro querido presidente Sánchez galopa en un caballo muerto y no quiere darse cuenta…pero a eso vuelvo luego. Es la Teoría del Caballo muerto de los indios Dakota. En esa época no tenían teléfonos, no tenía iPads, pero las ideas principales se aseguraban de que se transmitieran de generación en generación. Y más claros no podían ser. Y ellos dicen así: «Cuando descubres que estás montando un caballo muerto, la mejor estrategia es desmontar.» Algo que parecería obvio a mucha gente, ¿verdad? La teoría dice que en numerosas ocasiones empresarios utilizan estrategias más avanzadas como: 1.- El uso de un látigo más grande, para seguir fustigando al caballo. 2.- Cambio de jinete. 3.- El nombramiento de una comisión para estudiar al caballo. 4.- Organizar visitas a otros países para ver si en otras culturas montan caballos muertos. 5.- Bajar los requisitos, de modo que los caballos muertos puedan ser incluidos. 6.- Amenazar al caballo con matarlo. 7.- Reclasificación de los caballos muertos como vivos discapacitados. 8.- Contratar asesores externos que ayuden a montar al caballo muerto. 9.- Aprovechamiento de varios caballos muertos juntos para aumentar la velocidad. 10.- Proveer fondos adicionales para aumentar el rendimiento del caballo muerto. 11.- Hacer un estudio de productividad para ver si jinetes más ligeros podrían mejorar el rendimiento del caballo muerto. 12.- Declarar que como el caballo muerto no tiene que ser alimentado, es menos costoso, lo que implica menos gastos generales y por lo tanto, contribuye sustancialmente a la mejora de la base de la economía, más de lo que hacen otros caballos. (Muy del Presidente Sánchez) 13.- Redefinición de los requisitos de rendimiento esperado para el resto de los caballos. Y ésta última que me encanta: 14.- Promocionar al caballo muerto a una posición de dirección. ¿Conocéis a alguien que siga empeñado en montar un caballo muerto? Yo un par de ellos, y erre que erre, apuestan por algo que no les va a llevar más allá de sus narices. Hay empresas que se pasan la vida de reunión en reunión con una tabla de Excel delante, pero no se bajan al barro a ver qué es lo que está fallando. Analizar, evaluar y cambiar. Sí, pero también hay que ser coherente, palpar, vivir la situación y decidir. Debemos ser realistas y objetivos en la evaluación de los proyectos y negocios y redirigir los recursos hacia áreas más prometedoras. He estado con muchos alquiladores estas últimas semanas y trabajo hay para aburrir, se va mejorando en eso de subir los precios, pero claro, con la inflación que nos invade, hace que esas subidas de tarifas se queden cortas. Muchos empresarios se dejan la vida para ver cómo su rentabilidad es mucho más inferior a lo que se merecen. Es injusto, con todos los recursos que se invierten y todo el esfuerzo que se dedica. Complicado el tema. Porque sigue habiendo kamikazes empresarios, que les da igual el precio con tal de llevarse el proyecto. Además, muchas empresas están faltas de personal, algo en lo que se va trabajando desde las asociaciones y las propias empresas, pero hay que seguir trabajando en ello. La cantidad de gente cualificada que necesitamos en los próximos años es descomunal. Para quien no se haya enterado, es el cincuenta aniversario de la revista, y lo celebraremos a lo grande junto a los Premios el 28 de septiembre. En un año así, debíamos hacer algo extraordinario, y lo hemos hecho. Acabamos de lanzar la primera revista interactiva del mundo de maquinaria. Ojo, somos los primeros que lo lanzamos a nivel mundial, y no podemos estar más orgullosos de ello. GRACIAS a mi querido equipo por todo el esfuerzo, sin vosotros nada de esto sería viable. Así que nosotros no cabalgamos un caballo muerto, nuestro caballo tiene alas. ¡¡¡Vaaaaaaaaaaaaaaamos!!! FUERZA Y HONOR