E l comercio textil está inmerso en un proceso de constante transformación, impulsado por la digitalización y la apuesta por la sostenibilidad, que responden a las nuevas demandas de sus consumidores. Hoy, no basta con ofrecer productos de calidad o inspiradores. Los consumidores, cada día más sensoriales, demandan personalización, rapidez y una experiencia vital en cada interacción. En este sentido, la omnicanalidad, primero, y ahora el concepto Phygital se consolidan como un modelo que responde a todas estas necesidades. En España, el e-commerce ya representa el 22% de las compras de moda. Ese crecimiento va ligado también a la capacidad de combinar una experiencia de usuario superior, una estrategia de marketing eficaz y servicios exclusivos. Todo ello para dar respuesta a un consumidor mucho más exigente, informado, consciente y conectado, pero también más experiencial y vivencial. Si hay algo que diferencia al consumidor de moda es la necesidad de conectar con las marcas, y los grandes retailers del textil siempre han sabido cubrir, e incluso adelantarse a, sus necesidades y preferencias. Los canales digitales ya no son una mera plataforma de venta, sino que sirven para establecer una conversación constante, viva y dinámica que genera engagement , traslada los valores y el propósito de la marca y conecta con el corazón de los consumidores . Y en eso, el sector del comercio de moda sigue a la cabeza: plataformas omnicanal, streaming shopping , etiquetas electrónicas, la incorporación de experiencias en los puntos de venta... Todo contribuye a proporcionar una “conversación de compra” inmersiva e inspiradora, con la experiencia como valor de marca. Pero no debemos olvidar que la mejor experiencia de cliente se consigue gracias a los y las profesionales del sector, que son capaces de desarrollar la mejor tecnología, aplicarla al negocio y seguir siendo el corazón de la experiencia de compra en nuestros comercios a través de su atención personalizada.