Se implementan unas reglas del juego que no existían

Patrícia Posadas, responsable del proyecto Cultura Justa, ha pilotado el desarrollo y la implantación del mismo. “La compañía se halla en un momento de madurez organizativa en que pueden abordarse los aspectos de seguridad laboral, ambiental e industrial desde la parte más humana, de las conductas de las personas. Se implementan unas reglas del juego –comenta– que hasta ahora no existían y que permiten avanzar en la generación de un clima de confianza para comunicar situaciones que puedan suponer un riesgo”. Patrícia Posadas destaca la buena acogida que está teniendo el proyecto: “Hemos trabajado de forma muy colaborativa, y los representantes de los trabajadores se han mostrado muy activos a la hora de participar y concretar las reglas de juego, aportando una visión valiosa que creo que hemos reflejado en la documentación generada”. “Ciertamente –dice– tenemos por delante un reto, y esperamos que toda la organización esté motivada y convencida de que este cambio cultural nos beneficia a todos y nos hace mejores como compañía”.