la junta y, en tercer lugar, la oxidación de los elementos metálicos dispuestos. Existen diferentes sistemas de colocación, si bien no todos son idóneos para ser usados en las fachadas. Uno de los más habituales es en húmedo, es decir, mediante mortero de cemento cola (normalmente blanco) y varillas de acero corrugado colocadas en cada una de las juntas. Para dar una mayor dureza al mortero puede emplearse árido de marmolina. En este procedimiento es habitual necesitar un enmarcado perimetral, que se realiza con un perfil de acero con forma de U, pero teniendo la precau-ción de dejar la separación necesaria con él para permitir la absorción de tensiones y movimientos (puede interpo-nerse un material elástico). Otro sistema es el que está compuesto por guías prefabricadas para las juntas (de aluminio o PVC), crucetas para las esquinas (método de clic), fijaciones atornilladas para la sujeción perimetral y masilla de terminación para el sellado posterior. • FACHADAS AJARDINADAS Este tipo de fachadas reciben también otros nombres: jardines verticales, fachadas vegetales o fachadas verdes (green walls), si bien estas denominaciones no siempre tienen el mismo matiz para ciertos especialistas. El con- MUSAAT / pROFESIÓN Figura 6: vista de una famosa fachada ajardinada en Madrid.