REHABILITACIÓN / Casa Ayora La colocación se plantea de forma que se generen ta-pices de las distintas geometrías en cada una de sus salas, rodeadas por un anillo perimetral del nuevo pavimento hi-dráulico gris que, además, sirve de transición entre salas. A la premisa de no alterar la estética original del edi-ficio, se suma la necesidad de cumplir con la normativa de accesibilidad, por lo que se tuvo que levantar todo el empedrado del paso de carros, desde el acceso por la calle principal hasta el patio, recuperando las piezas de piedra caliza para su reposición, a una cota más alta, de manera que se enrasara con las aceras laterales y desapareciesen así los escalones de acceso a cada estancia. Papeles, pinturas y esgrafiados. Uno de los pilares fun-damentales que marcan el valor patrimonial del conjunto es, sin duda, los papeles pintados modernistas de pro-cedencia francesa que se encuentran en un estado real-mente bueno en las estancias nobles de la planta primera. A ellos se suman las pinturas murales y los esgrafiados que, mediante catas, salen a la luz, escondidos tras aca-bados menos nobles y, desde luego, posteriores. Las pinturas murales se encuentran en los techos de la planta primera y en la escalera, y datan de la época mo-dernista. En la planta baja, en lo que un día fue la entrada de carros, tras una decoración que asimila sillares sobre zócalo de azulejo valenciano propio de los años cuarenta, salen a la luz pinturas murales de la época modernista, conformando un jardín pintoresco de colores pastel y devolviéndole el aire fresco y primaveral que un día tuvo. Solo permanece el zócalo de azulejo valenciano, ya que, tras realizar las catas, se observa que no quedaban restos de la anterior época, y se decide conservar dicho zócalo como parte de la historia de la casa. Se encuentran también unos esgrafiados en las es-tancias de la planta baja, de la época barroca, huellas del siglo XVII que permanecían absolutamente ocultos bajo numerosos estratos de cal. El respeto a elementos pictó-ricos se convierte en una prioridad, por lo que la labor de restauración de los mismos es primordial. papeles, pinturas y esgrafiados