Seguir leyendo eMPRENDEDORES metros de altura son los que se planea que alcancen estas aeronaves, con capacidad para llegar hasta los 800, y cubrir un rango de 15 kilómetros. Texto JAIME LORITE Carlos Poveda UN TAXI EN LAS NUBES La tecnología del aerotaxi, que se presentó por primera vez en 2019, es 100% española, al igual que el diseño y el equipo involucrado. Cinco países se han interesado por el proyecto. “A donde vamos no necesitamos carreteras”, exclamaba el doctor Emmett Brown al final de Regreso al futuro, justo antes de que su DeLorean alzase el vuelo. Carlos Poveda (Madrid, 1982), director de Umiles, compañía dedicada a sistemas aéreos no tripulados, no ha descubierto aún los viajes en el tiempo, pero sí planea que los aerotaxis sean una realidad en menos de cinco años. “Es un sector innovador y de futuro en el que se está apostando con fuerza, confiamos en que la regulación acompañe en el ritmo”, cuenta. El proyecto de Umiles, pionero en España, es descrito por su líder como un “dron de drones”, al constar de cuatro de estos aparatos no tripulados con sus respectivos motores. “Al principio habrá un piloto tripulándolo, pero probablemente acabarán siendo naves autónomas”, indica Poveda, que explica que no solo se diferenciarán de los helicópteros en funcionamiento y diseño, sino también en “un confort sin precedentes para el pasajero y un incremento considerable en la seguridad”. El objetivo de la empresa, además, es que conste de cinco plazas y sus precios sean accesibles, algo, por otra parte, “favorable para el medio ambiente” por la ausencia de emisiones de carbono. Poveda tiene formación de piloto comercial e instructor de vuelo, y cuenta que la vocación le viene de su padre, cuya afición por la aeronáutica y la navegación heredó. “Me llevaba desde los 8 años a volar en ultraligero”, recuerda. Los niños de ahora podrán contemplar en el cielo, desde este mismo año, las pruebas de estos aerotaxis, que se testarán en ciudades como Madrid, Santiago de Compostela o Málaga.