los pilotos por contar con una titulación univer- modificar profundamente los pilares de nuestra Breguet XIX modelo sitaria que aportara mayor calidad y profundidad profesión en España, coincidieron con un ciclo utilizado por Barberán a nuestra formación humana, conocimientos y muy duro para la industria, un momento plagado y Collar en su habilidades. En este sentido, ya a finales de los de conflictos laborales, privatización de empresas prodigioso vuelo años 70 se avanzó mucho en las gestiones para públicas, la irrupción del modelo radical low cost lograrlo. Sin embargo, durante la década de los 80 y, por supuesto, los sucesos del 11-S que enseña- comenzó una progresiva paralización del proyec- ron al mundo el poder destructivo de nuestras to, a la vez que se iba vaciando de pilotos la ad- flamantes herramientas de trabajo. ministración aeronáutica. La posterior caída de la Basta una breve mirada a aquellos veinte años ENA y el gravamen con el IVA superespecial de la de intenso trabajo institucional para entender aviación general y deportiva dio el toque de gra- que la historia de la formación de pilotos, la histo- cia a un insustituible tejido aeronáutico de base ria con mayúsculas, está aún por comenzar. Una que tan solo era preciso ordenar y modernizar. historia que, gracias a la defensa radical de los Los reveses políticos y la desaparición de la ENA ideales de seguridad y eficiencia que hicimos los fueron duros golpes que los pilotos comprometi- pilotos españoles entonces, tendrá si queremos dos con las mejoras de la profesión tardamos en un esperanzador futuro de la mano de los valores encajar. Sin embargo, en 1991, esta vez desde la universales que acompañan a la formación aca- AEP arrancamos de nuevo, esta vez orientando démica en Europa. nuestros pasos hacia algo que entonces todo el mundo contemplaba como una inalcanzable Reescribiendo la historia. Reescribiendo la utopía: la creación en paralelo de nuestro colegio profesión profesional y un centro universitario donde iniciar Estos son los avances más sobresalientes que la historia académica de los pilotos civiles españo- se han producido en nuestra senda hacia la exce- les. La convicción, la ilusión con que presentamos lencia desde 1991, año en que comenzó nuestra nuestras legítimas aspiraciones, el sincero afán nueva andadura. En 1995, mientras se realizaban de mejora de la profesión con que asistimos a los las labores de creación del COPAC, se consiguió distintos ministerios, consejos de universidades, que el ministerio de educación y ciencia publica- consejo de estado, congreso y senado, caló de tal ra una orden homologando el título habilitante manera en los políticos que hasta el propio Minis- ATPL con el de diplomado universitario. Tras nu- tro de Fomento de la época, Rafael Arias Salga- merosas gestiones con distintas universidades de do quiso avalar nuestros trabajos aceptando ser toda España, fue la Rovira y Virgili, el Ayuntamien- nombrado miembro de honor de la A.E.P. to de Reus y la Generalitat quienes quisieron en- Las dos décadas posteriores al traumático cie- tonces proporcionarnos la estructura y los medios rre de la ENA, momento en que conseguimos para sacar adelante nuestro grado. Octubre 2019 • 41 EN PORTADA